Quemaduras

Las quemaduras se clasifican según su gravedad en tres categorías:

• Primer grado (Tipo A): Afectan únicamente la capa externa de la piel.
• Segundo grado (Tipo AB): Comprometen tanto la capa externa como la capa interna de la piel.
• Tercer grado (Tipo B): Dañan las capas profundas de la piel y los tejidos subyacentes.

Además, las quemaduras se dividen en:

• Quemaduras menores: Incluyen las de primer grado y las de segundo grado con menos de 7 cm de longitud.
• Quemaduras mayores: Comprenden las de tercer grado y las de segundo grado que superen los 7 cm o se localicen en zonas delicadas como la cara, manos, pies, articulaciones, genitales o glúteos.

Las quemaduras graves requieren atención médica inmediata para prevenir infecciones, cicatrices permanentes, discapacidad o incluso la muerte.

La Superficie Corporal Total (SCT) afectada y la profundidad de la quemadura son los principales factores para determinar la incapacidad. Uno de los métodos más utilizados para calcular la SCT es la "Regla de la Palma de la Mano", donde se considera que la palma (con los dedos) equivale al 1% del cuerpo.

Según esta regla, la incapacidad se calcula de la siguiente forma:

• Primer grado (Tipo A): Se suma el 50% de la SCT afectada.
• Segundo grado (Tipo AB): Se suma el 100% de la SCT afectada.
• Tercer grado (Tipo B): Se suma el 200% de la SCT afectada.

En algunos casos, también se evalúan otros factores, como:

• Daño psicológico: Si la quemadura afecta más del 10% de la SCT (Tipo B) o más del 25% (Tipo AB), o causa desfiguración facial.
• Movilidad articular: La reducción de la movilidad en la zona afectada puede incrementar el porcentaje de incapacidad.

Si tenés dudas, podemos solucionarlas.

Un trabajador sufre una quemadura Tipo B en todo el brazo. Según la Regla de la Palma de la Mano, el brazo equivale al 15% de la SCT:

1. Extensión de la quemadura: 15%
2. Profundidad (Tipo B): +30% (el doble de la extensión)
3. Pérdida de movilidad articular: +15%
4. Daño psicológico: +10%

En total, se calcula una incapacidad del 70%, más los factores de ponderación, como edad y dificultad para desempeñar tareas habituales.

Para cobrar la indemnización, es necesario:

1. Comunicar el accidente al empleador para que realice la denuncia a la ART.
2. Recibir atención médica inmediata proporcionada por la ART.
3. Iniciar un trámite en la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) tras el alta médica.

Un médico legista de la SRT evaluará la lesión y determinará el porcentaje de incapacidad conforme al Baremo establecido en el Decreto 659/96.

Te invitamos a utilizar nuestra calculadora de indemnización por Accidente de Trabajo, que te ayudará a estimar el monto de la indemnización que podrías recibir en tu caso.

Dado que el cálculo de la indemnización puede ser complejo, es fundamental contar con el acompañamiento de un abogado especialista en accidentes laborales que defienda tus derechos y garantice una compensación justa. Para más detalles y asistencia, no dude en consultarnos vía WhatsApp.